CÁNCER HEPÁTICO
¿QUÉ ES EL CÁNCER HEPÁTICO?
FACTORES DE RIESGO
- La cirrosis es el principal factor de riesgo asociado
- Infección crónica por el virus de la hepatitis B o el virus de la hepatitis C
- Enfermedades hepáticas hereditarias: Hemocromatosis, deficiencia de alfa 1-antitripsina, hepatitis autoinmune y algunas porfirias.
- Obesidad
- Diabetes
- Consumo excesivo de alcohol
- Hígado graso no alcohólico
- Exposición a aflatoxinas (3)
MANIFESTACIONES CLÍNICAS
- Masa o bulto duro en el lado derecho debajo de las costillas.
- Malestar en la parte superior derecha del abdomen.
- Hinchazón del abdomen.
- Dolor alrededor de la escápula derecha o en la espalda.
- Ictericia (la piel y la parte blanca de los ojos se vuelven amarillentos).
- Moretones o sangrados que aparecen con facilidad.
- Cansancio y debilidad anormales.
- Náuseas y vómitos.
- Pérdida del apetito o sensación de estar lleno después de comer porciones pequeñas.
- Pérdida de peso por motivos desconocidos.
- Heces blancas, y orina oscura.
- Fiebre. (2)
DIAGNÓSTICO
- Ultrasonido
- Tomografía computarizada
- Resonancia magnética
TRATAMIENTO
- Resección
- Trasplante hepático
- ablación percutánea
- quimioembolización
PRONÓSTICO
Cuando se diagnostica la enfermedad en estadio inicial, cuando es posible aplicar tratamientos con intención curativa como la resección quirúrgica, trasplante hepático y ablación percutánea, es posible conseguir la curación de la enfermedad y la supervivencia a cinco años puede superar el 70%.
En pacientes en estadio intermedio, el tratamiento con quimioembolización (TACE) permite una supervivencia media de entre dos años y medio y tres
Los pacientes en estadio avanzado, la supervivencia mediana es de 12-15 meses
CONCLUSIÓN
Es importante destacar que el cáncer hepático puede ser difícil de detectar en sus etapas tempranas, lo que puede dificultar su tratamiento efectivo. Sin embargo, con un diagnóstico precoz y un tratamiento apropiado, es posible mejorar las tasas de supervivencia y la calidad de vida de los pacientes. La prevención juega un papel crucial en la lucha contra el cáncer hepático, y adoptar un estilo de vida saludable y realizar pruebas de detección regulares puede ayudar a reducir el riesgo de desarrollar esta enfermedad.
Referencias:
Comentarios
Publicar un comentario